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Cada cierto tiempo es obligatorio llevar nuestro vehículo a que pase la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Es un tipo de mantenimiento en el que el vehículo es examinado de manera periódica por un ente certificador, que comprueba que el automóvil se encuentra en las condiciones optimas para circular pero, qué ocurre si el resultado es una itv desfavorable, ¿puedo ir a otra?
Según el tipo y los años que tenga el vehículo, la periodicidad para pasar la ITV es diferente. Por ejemplo, un coche que tiene más de 10 años tiene que pasar esta inspección cada año, pero si un coche tiene seis tiene que pasarla cada dos años.
Por lo general, pasar la ITV pone nervioso a cualquiera, es un momento de tensión, donde sabes que van a revisar diferentes aspectos de tu vehículo para ver posibles fallos o averías. Es muy importante que tu coche esté en buenas condiciones, ya que la ITV tiene un papel clave para la seguridad de los conductores y los peatones; que el vehículo esté en condiciones óptimas reduce la siniestralidad en la carretera. Debemos tener en cuenta que no es lo mismo conducir un coche en mal estado que conducirlo si todo está en orden.
Para tener el coche en las mejores condiciones ante cualquier imprevisto lo más aconsejable es contar con un seguro de coche que siempre responda cuando lo necesitas y se adapte a tus necesidades.
¿Qué revisan al pasar la ITV?
Todos los vehículos están obligados a pasar la Inspección Técnica de vehículos, y lo que se comprueba en ella principalmente son:
- Elementos externos, como los espejos, los bajos del coche y la carrocería.
- Elementos internos, que los asientos estén bien fijados, que las puertas funcionen correctamente, las ventanillas y los cinturones, entre otros.
- La mecánica del vehículo, como los frenos, los ejes o la suspensión.
- Señalización y luces, se comprueban que todas las luces funcionen correctamente, los intermitentes y los ejes.
¿Qué es una ITV desfavorable?
Una vez pasada la inspección puede que te encuentres con cuatro resultados diferentes, si el coche está en buenas condiciones, los diagnósticos posibles son dos, que este todo correcto y tengas una ITV favorable en la que te darán la pegatina, o que sea favorable pero con defectos leves, los cuales tendrás que solucionar.
En caso contrario, lo más probable es que tengas una ITV desfavorable, ya sea por un fallo grave o por una serie de fallos leves. Tendrás que llevar el coche al taller para resolver las deficiencias y volver en un periodo de dos meses para repetir la inspección. El último caso con el que te puedes encontrar es una ITV negativa, en la que tendrás que recurrir a una grúa para trasladar el vehículo.
La diferencia entre las dos últimas, es que si es desfavorable podrás circular de la estación al taller y viceversa, mientras que si es negativa tu vehículo será trasladado únicamente mediante una grúa.
En el caso de que no la pases, puede que t preguntes si puedes probar en otro sitio, así que es importante dejar claro que puedes acudir a otro punto de inspección técnica para que examinen tu vehículo.
Por tanto, la ITV es obligatoria, es una medida para controlar que estén todos los vehículos en buenas condiciones. Si te quedas más tranquilo puedes hacer una revisión pre-ITV antes de pasarla.