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La adquisición de una casa es una de las inversiones más importantes que puede realizar una persona y, generalmente, esta se convierte en la parte más valiosa de su patrimonio. Dicho esto, parecería conveniente asegurar el hogar ante incidentes como incendios, robos, inundaciones, etcétera.
Contratar un seguro de hogar es siempre de gran ayuda, ya que nos protege de situaciones desafortunadas que pueden alterar nuestra vida. Lo cierto es que si bien en España no es obligatorio contar con seguro de hogar, muchos titulares de viviendas los contratan para proteger su patrimonio.
Asimismo, la cobertura de un seguro del hogar para incendios tampoco es obligatoria, pero generalmente se encuentra incluida en los seguros del hogar. Y desde aquí, siempre recomendaremos que se contrate, ya que muchas personas no son completamente conscientes de las graves consecuencias que puede conllevar el hecho de que se produzca un fuego en su domicilio. Los seguros contra incendios para casas se pueden incluir de forma adicional en los seguros del hogar.
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¿Cuándo es obligatorio contar con seguro de incendio?
Si te preguntas si el seguro de incendios de hogar es obligatorio, debes saber que en España no lo es. La única excepción es cuando la vivienda está sujeta a una hipoteca. En este caso sí tenemos que tener contratado un seguro contra incendios para departamentos o casas.
¿Es obligatorio tener seguro de incendio en caso de alquiler?
Alquilar es una alternativa beneficiosa que puede ayudarte a obtener independencia, pero a su vez conlleva una gran responsabilidad, ya que nos permite hacer uso de un bien muy valorado que pertenece a otra persona. Que la vivienda cuente con un seguro de hogar, suele correr por cuenta del propietario de la misma. Sin embargo, aunque el inquilino no tenga la responsabilidad de contratarlo, se recomienda que lo haga para proteger el contenido de la misma. En caso de que ocurra algún incidente y la casa no cuente con póliza de hogar, será él quien tenga que pagar por todos los daños ocasionados y nadie se hará cargo de reponer sus pertenencias.
Por esta razón, a pesar de no ser obligatorio, contratar un seguro de incendios para un alquiler te brindará la tranquilidad de estar protegido ante cualquier tipo de situación conflictiva en tu hogar.
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Seguro de incendios: coberturas
Es importante prestar mucha atención y contar con ciertos aspectos presentes para conocer el límite de la cobertura contratada de los seguros contra incendios, ya que no siempre quiere decir que nuestro seguro va a pagar el monto total sin importar el motivo que haya provocado el incendio. Con esto queremos decir que el seguro de hogar contra incendios se encargará de aquellos cuyo origen se produzca de forma accidental, mientras que si se produce por dolo o culpa del asegurado, seguramente se rechazará la petición.
Las coberturas de seguros de incendio más comunes son las siguientes:
- Daños ocasionados por incendios: la aseguradora se encarga de cubrir los daños ocasionados por las llamas.
- Alojamiento provisional: en este caso, la aseguradora se encarga de costear el precio de otro alojamiento mientras se repara la casa incendiada o se busca una nueva casa donde vivir.
- Coste de los bomberos: en este caso, la aseguradora se haría cargo de cubrir la totalidad o una parte de los gastos por apagar el fuego y/o rescatar a las personas dentro del hogar.
- Reconstrucción de la vivienda: con este tipo de seguro, la empresa contratada se encargaría de la reconstrucción de la vivienda. Generalmente se fija un límite máximo para los costes de reconstrucción.
- Reconstrucción del jardín: hay empresas que se ofrecen a reconstruir los elementos del jardín que se hayan visto afectados por un incendio.
¿Qué hacer en caso de incendio?
En caso de tener la desgracia de sufrir un incendio en nuestra vivienda, lo primero que tenemos que hacer es mantener la calma, poner a salvo a las personas que se encuentren en la vivienda y no poner en riesgo nuestra vida. Si el incendio ya ha cogido un gran tamaño, se recomienda intentar salir de la vivienda.
En el hipotético caso de que creamos que no se puede salir, se recomienda empapar las toallas, cerrar todas las puertas y subir a la terraza o, en caso de no tenerla, refugiarnos en la habitación más alejada del fuego y abrir las ventanas de la misma. También se recomienda tapar las rendijas de las puertas con las toallas mojadas para evitar corrientes de aire y filtraciones de humo. Una vez que ya nos encontremos a salvo, debemos llamar al servicio de emergencia para que se encargue de extinguir el fuego.
Una vez que se haya extinguido el fuego, debemos revisar todos los desperfectos y daños estéticos que cubre el seguro del hogar y tomar nota de todos aquellos bienes que teníamos asegurados y que han sido dañados por acción directa del incendio. Luego se recomienda llamar a la aseguradora e informar de lo ocurrido. Tenemos un plazo de hasta siete días para notificar cualquier siniestro cubierto por la póliza y la aseguradora tiene un plazo de hasta cuarenta días para respondernos.