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¿Quién inventó el limpiaparabrisas?

16 de diciembre de 2019

Seguro que muchas veces ni te has parado a pensar en la creación de muchas de las cosas de uso cotidiano, quién fue el inventor de ese objeto que utilizas todos los días. A continuación, vamos a hablar de quién inventó el limpiaparabrisas, cómo lo hizo y su evolución hasta la actualidad.

El limpiaparabrisas, al igual que el seguro del coche, es algo imprescindible. En este caso, nos sirve para mantener limpias las lunas de suciedad o de fenómenos meteorológicos como la lluvia y la nieve. Es muy importante mantener el parabrisas limpio, ya que sino la suciedad puede afectar a la visibilidad del conductor, y como consecuencia puede suponer un riesgo para los pasajeros del vehículo.

El inventor o inventores del limpiaparabrisas

Antiguamente, antes de la existencia de este invento, era habitual que cuando el parabrisas se ensuciaba los conductores pararan el coche para limpiarlo a mano. Una maniobra incómoda, sobre todo en días de tormenta y lluvia, ya que esto implicaba bajarse continuamente del vehículo.

El invento del limpiaparabrisas se asigna a tres personas que tuvieron la misma idea en la misma época, Mary Anderson, Robert Douglas y John Apjohn. Aunque el mérito del invento hay que asignárselo a Anderson, cuya idea de limpiaparabrisas fue la más eficaz. 

Por tanto, el limpiaparabrisas lo invento Mary Anderson. Una mujer nacida en Estados Unidos en 1886 que por casualidad un día observó lo incómodo que era limpiar a mano constantemente el parabrisas del automóvil. A partir de ese momento desarrolló el proyecto.

Concretamente, todo empezó durante el invierno de 1903, cuando Anderson viajaba a Nueva York. Durante todo el trayecto observo que los conductores tenían que parar y bajarse constantemente del vehículo para limpiar el parabrisas de hielo y suciedad, una verdadera pérdida de tiempo.

La evolución del limpiaparabrisas

A partir de 1903 Anderson creó varios diseños caseros en papel de un artilugio que desde el interior del coche pudiese ser impulsado para limpiar el parabrisas, hasta que en 1905 patentó el limpiaparabrisas que había diseñado. Se trataba de un mecanismo que funcionaba con una palanca en el interior del vehículo y un brazo de resorte que se movía hacia adelante y hacia atrás con la ayuda de un contrapeso que permitía que la escobilla estuviese en contacto con el cristal. 

Este primer desarrollo de palanca, necesitaba que el conductor lo accionara y manejara de forma manual y, gracias al sistema giratorio construido con una lámina de goma que se apoyaba sobre el parabrisas, limpiaba el cristal. A partir de este simple concepto, se comenzaron a desarrollar el resto de ideas hasta llegar a la actualidad.

Hoy en día el limpiaparabrisas ha evolucionado hasta convertirse en un brazo mecánico con una goma que se mueve por el cristal del vehículo. Con el movimiento sobre el cristal va desplazando el agua mientras se limpia. En cuanto a la velocidad, gracias a la tecnología, hay distintos tipos de velocidades que el conductor puede modificar según prefiera y, además, se pueden incluir diferentes sistemas en el vehículo que hacen que funcione de forma autónoma cuando comienza a llover o nevar.

El limpiaparabrisas facilita y facilitó la vida de los conductores y los pasajeros, a día de hoy no hay vehículo que no lleve incorporado uno. Mary Anderson, no recibió el mérito que se merecía, pero fue una de las muchas mujeres inventoras que con su mente ingeniosa crearon aparatos que usamos cada día.