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Montar en moto es una experiencia de libertad incomparable. Sin embargo, es importante reconocer que cualquier incidente durante la conducción puede resultar peligroso. Por ello, es fundamental estar preparado para afrontar situaciones como un derrape. La naturaleza de este vehículo de dos ruedas lo convierte en uno de los más riesgosos en las carreteras, ya que el cuerpo del conductor no cuenta con la protección que ofrecen los vehículos de cuatro ruedas.
Uno de los mayores riesgos para los motociclistas es sufrir un derrape en alguna de las ruedas, ya sea la delantera o la trasera. Este fenómeno puede ocurrir debido a diversas razones, como el exceso de velocidad, la mala aplicación de los frenos o la incorrecta toma de curvas, así como las condiciones adversas de la carretera, como superficies mojadas o sucias.
El sistema de frenado de una motocicleta juega un papel crucial en la gestión de los derrapes, ya que es responsable de reducir la velocidad de las ruedas. Sin embargo, si los neumáticos no tienen una adecuada adherencia a la carretera, este sistema puede volverse ineficaz, especialmente cuando las ruedas se bloquean durante un derrape.
Las causas del derrape radican en el bloqueo de la rueda, lo que prolonga la distancia de frenado en lugar de reducirla, como suele pensarse. Este bloqueo impide maniobrar adecuadamente y compromete la eficacia del sistema de frenado. Además, frenar mientras se reduce el ángulo de inclinación durante una curva puede provocar un derrape y, potencialmente, una caída, por lo que es crucial evitar frenar en esta situación.
En caso de experimentar un derrape, es esencial mantener la calma y actuar de manera adecuada. Ajustar la velocidad, mantener la concentración en la conducción y verificar la presión de los neumáticos son medidas preventivas importantes. A continuación, se detallan las acciones recomendadas en caso de derrape en la rueda delantera y trasera:
Es fundamental seguir estos consejos y actuar con precaución en caso de bloqueo de las ruedas y derrape. Contar con un seguro de moto que cubra cualquier imprevisto en la carretera también es esencial para una conducción tranquila y segura.
Desde 2016, una normativa obliga a todas las motocicletas a estar equipadas con un sistema ABS, que ayuda a prevenir el bloqueo de las ruedas y, por lo tanto, reduce la posibilidad de derrapes.