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El concepto de eficiencia energética a veces no es sencillo de comprender, y es lo que vamos a tratar de explicar en este artículo.
La eficiencia energética hace referencia al uso optimizado de la energía durante un proceso (en un aparato eléctrico, una instalación, etc.). Un proceso se considera eficiente cuando se consume menos energía de media para realizar la misma actividad.
Relacionado con la vivienda habrás escuchado hablar del certificado de eficiencia energética. Simplemente es un justificante del Ministerio que se requiere para cualquier vivienda que se vaya a alquilar o comprar.
En el documento se han de incorporar los aspectos energéticos del domicilio para que se puedan calificar y evaluar los elementos que conforman el inmueble, lo que origina la etiqueta energética.
Te recomendamos que le eches un vistazo a este otro post, en el que hablamos de la obligatoriedad del certificado energético en caso de alquiler.
En la etiqueta energética se detalla la calificación de una vivienda siguiendo las escalas establecidas entre la A y la G, siendo A la calificación más elevada y la G la más baja. También estas etiquetas están coloreadas desde un verde oscuro, que representa la eficiencia energética máxima, hasta el color rojo que representa a la que no cuenta con ningún tipo de eficiencia energética.
Cualquier usuario del mercado energético ha de tener en cuenta que la duración de estas etiquetas es de diez años desde su emisión.
La emisión del certificado es responsabilidad de técnicos debidamente autorizados, los cuales pueden ser arquitectos, ingenieros o técnicos especializados. Los usuarios tienen la libertad de elegir con qué empresa profesional desean llevar a cabo este proceso.
Dicho coste se establece en función de la demanda y la oferta actual. Lo más recomendable es consultar siempre con varias empresas mediante presupuestos personalizados.
Es necesario contar con este certificado para entrar en el mercado inmobiliario, pero no es necesario para un monumento histórico o un edificio religioso, viviendas que no se vayan a alquilar durante más de cuatro meses en un año, viviendas de menos de cincuenta metros cuadrados, edificios destinados a aspectos agrícolas o industriales e inmuebles que sean una construcción provisional.
Si no se tiene dicho certificado el consumidor puede enfrentarse a multas de entre 300€ y 6.000€ según se establece en la Ley 8/2013 del 26 de junio.
No tener la vivienda debidamente climatizada en verano y en invierno es una de las fuentes principales de gasto que asumen los propietarios. Dicho consumo varía en función de la eficiencia en cuanto al consumo energético que depende de dos factores cruciales:el uso de energías renovables y el aislamiento térmico.
Recuerda que cualquier edificio que se quiera alquilar o vender necesita obtener la etiqueta de eficiencia energética nombrada anteriormente.
A partir de ahora, si te encuentras en una conversación con compañeros o conocidos ya sabrás explicarles qué es la eficiencia energética y lo importante que es un hogar eficiente de cara al ahorro y al cuidado del medio ambiente.
También podrás ayudar a tus amigos recomendándoles alguno de los seguros de hogar de Verti, con los que podrán ahorrar con la tranquilidad de estar protegidos.