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Si has decidido comprar tu vivienda, estás a punto de dar uno de los pasos más importantes de tu vida. Una inversión de esta naturaleza puede parecer, en ocasiones, abrumadora. Por eso, hemos decidido echarte una mano, y vamos a contarte a qué gastos te enfrentarás al adquirir tu vivienda.
Si eres tan afortunado como para poder pagar a tocateja, te librarás de los gastos hipotecarios. Pero todavía tendrás que pagar los gastos de la compra de una vivienda nueva.
Al tratarse de una vivienda nueva, tendrás que pagar el Impuesto sobre el Valor Añadido (I.V.A.) como pagarías por cualquier otro producto. Este impuesto ascenderá a un 10 % del precio de venta inicial.
El Impuesto de Actos Jurídicos Documentados es una variación del Impuesto de Transmisiones. Al ser un impuesto autonómico, puede variar, pero se sitúa en torno al 1 % del precio de la vivienda. Si la casa fuera de segunda mano, tendrías que abonarlo en su modalidad de Transmisiones Patrimoniales, que oscila entre un 5 y un 10 % del precio de la transmisión.
Los gastos de notaría responden a un arancel, que puedes comprobar en el RD 1426/1989. Puede parecer un poco críptico, pero ten en cuenta que, dependiendo del valor de tu vivienda, acabarás pagando entre 400 y 500 euros.
Inscribir una propiedad en el Registro de la Propiedad, está sometido a unas tarifas que dependen de las circunstancias de la inscripción. Lo cierto es que el Registro de la Propiedad es tan sólo un método de prueba privilegiado. Por eso, no es necesario inscribir nuestro inmueble para demostrar que nos pertenece.
Sin embargo, los gastos rondan entre los 200 y los 300 euros. Por eso, los compradores terminan inscribiendo su vivienda. Eso sí, si vas a pedir una hipoteca, la inscripción en el Registro se convierte en obligatoria.
Antes de solicitar tu hipoteca para la compra de tu vivienda, infórmate de qué gastos debes cubrir íntegramente y qué productos puedes rechazar. Al documentarse en escritura pública, pagarás de nuevo los gastos de notario y registro, por cuantías similares.
Además, tendrás que añadir la tasación (de 200 a 400 euros) y la gestoría (otros 200 o 400 euros). En ambos casos, recuerda que estos profesionales fijan libremente sus precios y que no tienes por qué contratar con los que proponga el banco.
Por otro lado, está el impuesto de actos jurídicos documentados, que de nuevo oscila en torno al 1 %.
En conclusión, tienes que tener en cuenta estos gastos al comprar una vivienda nueva. Cuenta con unos costes de entre 600 y 800 euros, más el 11 – 12 % de su valor, solo en la compraventa. Por otro lado, la hipoteca tendrá unos gastos similares, más el 1 % de su valor. Además, te interesará asesorarte para que no te coloquen productos indeseados.
¡No te asustes! Si la factura no te ha quitado las ganas de embarcarte en esta aventura, echa un vistazo a todo lo que Verti puede hacer por ti. Asegura tu hogar con nosotros y evítate un disgusto. Un secreto: el banco puede obligarte a contratar un seguro de amortización, pero no a contratarlo con su aseguradora. Ahorra con nosotros.