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Aunque no lo parezca, la diferencia entre un robo y un hurto tiene gran importancia en un proceso de reclamación a tu compañía de seguros. De hecho, algunas personas se han encontrado con la desagradable situación de haber sufrido un “robo”, en el sentido más amplio de la palabra, y no haber recibido compensación económica de
ningún tipo.
Si este es tu caso, continúa leyendo porque desde Verti te vamos a dar las claves para diferenciar correctamente entre uno y otro en función de los estándares establecidos por el sector asegurador español, concretamente en lo que refiere al seguro de hogar.
Para comprender por qué el seguro de hogar hace diferencia entre robo y hurto es imprescindible definir en qué consiste cada uno de ellos:
Hablamos de hurto cuando la sustracción del bien en cuestión ha corrido a cargo de alguien con acceso a la vivienda asegurada, de modo que para obtenerlo no ha tenido que imponer la fuerza. Es decir, esa persona accede de forma regular al hogar sin restricciones o con bajas restricciones por parte del titular o titulares de la póliza.
Ten en cuenta que si has cometido un descuido, como dejar una ventana abierta o no cerrar bien las puertas de tu domicilio, se considerará una negligencia y el seguro no estará obligado a cubrir la indemnización.
Por otro lado, un robo refiere un entorno de sustracción muy diferente, en el que la persona a cargo del robo ha tenido que usar la fuerza para conseguir su objetivo. Entre las actuaciones que pueden considerarse dentro del uso de la fuerza también se incluyen la intimidación y el burlado de medidas de seguridad, como vallas, o muros exteriores, o la desactivación de sistemas de alarma.
Como puedes apreciar, la principal diferencia entre robo y hurto radica en el uso o no de la fuerza para obtener el bien de tu propiedad.
Verti, como no podría ser de otra manera, aclara en las condiciones generales del seguro de hogar estas diferencias entre robo y hurto, haciendo referencia a las indemnizaciones específicas en uno u otro caso dependiendo del tipo de coberturas que se contraten.
Antes de contratar tu póliza de hogar, ten en cuenta que la mayoría de las compañías ofrecen coberturas por robo en sus seguros, pero en pocos casos se cubre el hurto. Esto sucede por la frecuencia con la que ocurren y por el papel desencadenante que haya podido tener el tomador de la póliza en la sustracción de sus bienes.
Para terminar, cabe señalar que la mejor forma de cubrirse ante un hurto es siguiendo algunas sencillas recomendaciones de seguridad. No hay mejor forma de solucionar un problema que prevenirlo, y ahí radica
precisamente la principal diferencia entre el robo y el hurto. Ambas son situaciones que pueden a llegar a ser muy traumáticas, pero a diferencia del robo, evitar un hurto es relativamente sencillo si revisamos correctamente nuestra vivienda y no se lo ponemos fácil a los ladrones.