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Con la llegada de las vacaciones son muchos los que deciden planificar un viaje en coche, pasando por diversas localidades y disfrutando de la libertad de movimiento que da este vehículo. Pero si esta planificación ya implica una gran preparación previa con un coche convencional, hacerla con un coche eléctrico supone una incógnita para muchos.
En realidad, hacer largos trayectos en coche eléctrico no tiene por qué ser complicado, pero hay que tener en cuenta ciertos aspectos antes y durante el viaje para así evitar contratiempos y poder disfrutar al máximo.
Antes de poner rumbo a tu destino es esencial recargar al máximo tu coche eléctrico para asegurar una autonomía máxima en los primeros kilómetros. Pero, además, es igual de importante tener en cuenta e informarse con tiempo de ciertos aspectos que ayudarán a optimizar la autonomía de tu coche y a perder el miedo de quedarse sin corriente en medio de la carretera.
Ten en cuenta que este post se ha publicado durante el verano de 2021, mientras la tecnología detrás de la movilidad eléctrica se mantiene en plena efervescencia. Con total seguridad, la autonomía de los vehículos eléctricos, factor más importante a la hora de planificar una ruta a día de hoy, aumentará de forma considerable con el tiempo, así como los puntos de recarga disponibles a lo largo de toda la geografía.
Recuerda que Verti ofrece seguros para coches eléctricos, ideados para atender las demandas y riesgos de esta nueva forma de movilidad.
Ten en cuenta los siguientes consejos para planificar tu ruta con un coche eléctrico:
Con un coche de combustión no es necesario organizar los repostajes, ya que es muy probable que haya alguna gasolinera por el camino. Sin embargo, en los viajes en coche eléctrico es muy recomendable tener localizados los puntos de recarga o planificar tu ruta basándote en sus ubicaciones para poder cargar la batería del vehículo cuando lo necesites.
El tiempo de carga es otro factor a tener en cuenta. Dependerá en gran parte del tipo de cargador, ya que existen algunos de carga rápida que recargan la batería del coche al 80% en apenas una hora (y todo apunta a que los tiempos de recarga mejorarán progresivamente). También es importante saber si hay que esperar o no para utilizarlo, ya que siempre se tendrá que realizar una parada más larga que con un coche convencional.
La orografía también influye en el consumo de tu coche eléctrico. No es lo mismo conducir por una carretera recta y llana que hacerlo en un puerto de montaña por el que se tiene que ascender.
A la hora de planificar una ruta con tu coche eléctrico, seleccionar carreteras en llanuras o con una inclinación hacia abajo ayudará a que el vehículo consuma menos y optimice su autonomía, tanto en la ida como en la vuelta.
Aunque resulte un factor obvio, suele tenerse poco en cuenta. Cuánto más peso se le añada al coche eléctrico, más consumirá al conducirlo. Se tiene que considerar el peso de todo el conjunto, desde el número de pasajeros hasta el equipaje.
No es lo mismo viajar solo que hacerlo con un acompañante (o toda la familia), así como también es diferente planificar una ruta si tienes que llevar todo tu armario o únicamente lo justo y necesario para unos días.
De la misma manera que hay que tener localizados los puntos de recarga en el itinerario, elegir alojamientos cerca de estaciones de recarga resultará fundamental para tener cargado y listo tu coche eléctrico cada día, ya sea para otra ruta larga o para la misma escapada. Además, como alternativa, también existen centros comerciales o aparcamientos públicos donde se pueden encontrar puntos de recarga y que pueden estar situados cerca de donde te hospedes.
Durante una ruta con un coche eléctrico también se tienen que considerar ciertos factores que pueden afectar al viaje, y en concreto a la autonomía del coche eléctrico. Algunos pueden mantenerse bajo control, pero otros son de carácter más variable e impredecible.
El aire acondicionado, los altavoces o las pantallas son elementos que también consumen batería del coche. Se recomienda, por tanto, moderar su uso, sobre todo cuando la batería está por debajo de la mitad. Quizás en algunos tramos no sea necesario el aire acondicionado, o puedes escuchar música o la radio desde otro dispositivo. Todo es cuestión de adaptarse a las circunstancias y de evitar que la batería se consuma más rápido por elementos prescindibles.
La forma de conducir resulta también importante para afrontar un viaje con un coche eléctrico. Esto no significa que la conducción tenga que cambiar, sino que basta con adaptarla al vehículo: más suave, regular, sin frenadas o aceleraciones bruscas y con una velocidad constante.
Recuerda que, como pasa con los coches de combustión, cuanto mayor sea la velocidad más rápido se consume la energía.
Tomar en consideración los factores ambientales a la hora de planificar tu ruta con un coche eléctrico también ayudará a mejorar la experiencia de conducción, aunque en ocasiones serán casi imposibles de controlar o predecir de un día para otro.
Por ejemplo, si vas a viajar en un día de fuertes vientos que vienen de cara, tendrás que bajar la previsión de consumo de energía. También si es un día de mucho frío, ya que tiene cierto impacto en el rendimiento de las baterías.
Sin duda, viajar o realizar un trayecto largo en coche eléctrico es posible hoy en día. Solo es necesaria una planificación más exhaustiva que si se hiciese con un coche de combustión tradicional y considerar ciertos factores para poder alargar la autonomía del vehículo al máximo.
En conclusión, todo es cuestión de incorporar algunos hábitos para asegurar un viaje cómodo y una experiencia de conducción excelente.