Conductor sin seguro: ¿Qué pasa en caso de accidente?

Conducir sin seguro en España no solo es ilegal, sino que puede acarrear graves consecuencias, especialmente en caso de accidente. En este artículo aclararemos qué implica circular sin seguro, si es posible asegurar un coche sin carné y qué ocurre cuando un conductor no habitual está involucrado.

¿Se puede conducir sin seguro?

La respuesta es clara: no, conducir sin seguro está prohibido en España. Según la legislación vigente, todo vehículo a motor que circule por la vía pública debe estar asegurado, al menos con la cobertura mínima de responsabilidad civil.

Las sanciones por conducir sin seguro incluyen:

• Multas económicas: Pueden oscilar entre 601 y 3.000 euros, dependiendo de las circunstancias.
• Retirada del vehículo: Tu coche podría ser inmovilizado y enviado al depósito municipal.
• Responsabilidad en caso de accidente: Si provocas un accidente, deberás asumir todos los gastos de los daños materiales y personales causados, lo que puede suponer cantidades muy elevadas.

Circular sin seguro no solo es un riesgo para ti, sino también para los demás usuarios de la carretera.

¿Puedo asegurar un coche sin tener carné para conducir?

Sí, es posible asegurar un coche sin disponer de carné de conducir. Sin embargo, hay ciertos aspectos a tener en cuenta:

• Aunque no tengas carné, podrías ser el titular del vehículo y necesitar un seguro. En este caso, deberás incluir a un conductor principal que sí esté habilitado para conducir.
• Las aseguradoras pueden establecer limitaciones o condiciones específicas para estas pólizas, como un coste más elevado debido al riesgo potencial.

Asegurar un coche sin carné puede ser útil si, por ejemplo, tienes un vehículo a tu nombre pero otra persona será la que lo conduzca habitualmente. Consulta las opciones de seguros de coche como Verti  para encontrar la cobertura adecuada.

¿Cubre el seguro a un conductor no habitual?

La cobertura de un seguro para un conductor no habitual dependerá de las condiciones específicas de la póliza. Algunas cuestiones clave son:

1. Conductor no declarado: Si el conductor no habitual no está incluido en la póliza, la aseguradora podría negarse a cubrir los daños en caso de accidente, especialmente si no cumple con el perfil asegurado (edad, experiencia, etc.).
2. Cobertura limitada: En algunos casos, aunque el conductor no esté declarado, la compañía podría cubrir los daños a terceros, pero no los del propio vehículo.
3. Conductores adicionales: Muchas aseguradoras permiten incluir conductores ocasionales en la póliza, garantizando así una mayor tranquilidad.

Si planeas compartir tu vehículo con alguien más, es recomendable informar a tu aseguradora para evitar sorpresas desagradables en caso de siniestro.